En Residencias y Salud encontrará la residencia de mayores que mejor se adapta a sus necesidades. Disponemos de la base de datos de residencias y centros de día más completa de España.
Le ayudamos a organizar la visita a la residencia. Para que pueda comprobar de primera mano el estado de las instalaciones y cómo trabaja el personal. Esencial para hacer la mejor elección.
En Residencias y Salud hacemos un seguimiento de su caso, para que conozca las diferentes residencias disponibles. Así como la disponibilidad de plazas y lista de espera.
El equipo de Residencias y Salud tiene una amplia experiencia en el sector de la geriatría y ha trabajado con muchas residencias de mayores. Utiliza esa experiencia para encontrar la residencia que mejor se adapta a sus necesidades y situación. Es decir, el equipo tiene en cuenta la edad del mayor, su salud y su grado de dependencia, las posibles enfermedades y complicaciones, a lo que hay que añadir sus preferencias sobre precio, localización y si dispone de plazas concertadas o vinculadas al servicio. Comprobamos que haya plazas libres y le informamos de sus opciones.
Una residencia para mayores es un lugar donde las personas de edad avanzada, que requieren cuidados y asistencia diaria, pueden vivir. Estas residencias ofrecen alojamiento, atención médica, servicios de enfermería, terapia ocupacional, actividades recreativas y apoyo emocional para mejorar la calidad de vida de los residentes. También se les proporciona alimentación, cuidado personal, ayuda en tareas domésticas y administración de medicamentos, entre otros servicios. Las residencias para mayores están diseñadas para atender las necesidades físicas, cognitivas y emocionales de las personas mayores, brindándoles un entorno seguro y adecuado para su bienestar.
Hay varias clasificaciones de residencias de mayores. Dependiendo de la gestión de la residencia y de la modalidad de alojamiento.
Según la gestión se pueden encontrar:
Según la modalidad de alojamiento hay:
Un centro de día es un lugar que ofrece atención y cuidado diurno a personas en situación de dependencia, como personas mayores, personas con discapacidades físicas o mentales, o personas con enfermedades crónicas. En un centro de día, se proporcionan servicios básicos como alimentación, atención sanitaria, terapias físicas o cognitivas, actividades recreativas y sociales, entre otros. El objetivo principal de un centro de día es brindar apoyo y estimulación a las personas para promover su autonomía, mejorar su calidad de vida y ofrecer un descanso a sus cuidadores principales.
Una residencia es un lugar donde las personas mayores pueden vivir de forma permanente si necesitan atención y cuidados diarios. En este tipo de establecimiento, las personas tienen alojamiento, alimentación, atención médica y asistencia personalizada las 24 horas del día.
Por otro lado, un centro de día es un lugar donde las personas mayores reciben atención durante el día pero regresan a sus hogares por la noche. En un centro de día, las personas pueden participar en actividades terapéuticas, recibir cuidados de enfermería, rehabilitación y socializar con otros adultos mayores. Además, tienen la posibilidad de continuar viviendo en su hogar, ya que el centro de día brinda apoyo y cuidados durante el día.
La principal diferencia radica en el alojamiento, ya que en una residencia las personas mayores viven permanentemente allí, mientras que en un centro de día solo asisten durante el día y continúan viviendo en sus hogares. Además, las residencias suelen ofrecer una atención más intensiva y constante, mientras que los centros de día brindan atención durante el día y permiten a las personas mayores mantener su autonomía en sus propios hogares.
Una residencia es un lugar donde las personas mayores pueden vivir de forma permanente si necesitan atención y cuidados diarios. En este tipo de establecimiento, las personas tienen alojamiento, alimentación, atención médica y asistencia personalizada las 24 horas del día.
Por otro lado, un centro de día es un lugar donde las personas mayores reciben atención durante el día pero regresan a sus hogares por la noche. En un centro de día, las personas pueden participar en actividades terapéuticas, recibir cuidados de enfermería, rehabilitación y socializar con otros adultos mayores. Además, tienen la posibilidad de continuar viviendo en su hogar, ya que el centro de día brinda apoyo y cuidados durante el día.
La principal diferencia radica en el alojamiento, ya que en una residencia las personas mayores viven permanentemente allí, mientras que en un centro de día solo asisten durante el día y continúan viviendo en sus hogares. Además, las residencias suelen ofrecer una atención más intensiva y constante, mientras que los centros de día brindan atención durante el día y permiten a las personas mayores mantener su autonomía en sus propios hogares.