Solo el 16% de los Pacientes Tiene Acceso a Pruebas de Biomarcadores del Alzheimer
La enfermedad de Alzheimer representa uno de los mayores desafíos sanitarios a nivel global, con aproximadamente 800.000 personas afectadas en España y 6,9 millones en Europa. El diagnóstico temprano y preciso es fundamental para mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familias, así como para optimizar el acceso a tratamientos emergentes. Las pruebas de biomarcadores, como el análisis de líquido cefalorraquídeo o técnicas de neuroimagen, permiten detectar cambios patológicos característicos del Alzheimer antes de que los síntomas cognitivos sean graves. Sin embargo, su acceso a pruebas de biomarcadores del Alzheimer sigue siendo limitado. Tal como revela el estudio multinacional Adelphi Real World Dementia.
Solo el 16% de Pacientes Accede a Pruebas Esenciales de Biomarcadores del Alzheimer
Según el estudio presentado en la Alzheimer Europe Conference 2025, solo el 16,1% de los pacientes en España tiene acceso a pruebas de biomarcadores para confirmar el diagnóstico de Alzheimer. A pesar de que más del 80% de los especialistas las consideran fundamentales. Esta brecha no es exclusiva de España; a nivel internacional, la media de acceso es del 15,2%. Estos datos reflejan una desconexión preocupante entre la valoración médica de estas herramientas y su implementación real en la práctica clínica. La encuesta, que incluyó a 779 médicos y 5.551 pacientes en siete países, subraya la urgencia de abordar esta disparidad.
Barreras en el Proceso Diagnóstico: Retrasos y Desigualdades
Uno de los hallazgos más críticos del estudio es el retraso significativo en el proceso de derivación a neurología. En España y Francia, el tiempo medio para obtener un diagnóstico de Alzheimer alcanza los cinco meses, duplicándose en comparación con otros contextos clínicos. Además, el 30,8% de los pacientes con demencia leve y el 34,6% con deterioro cognitivo leve no son derivados con la suficiente rapidez a especialistas. Que puedan requerir el acceso a pruebas de biomarcadores del Alzheimer. Estas demoras no solo prolongan la incertidumbre para las familias, sino que también retrasan el acceso a intervenciones terapéuticas y cuidados especializados.
Estigma y Falta de Concienciación: Obstáculos Clave
El estigma asociado al Alzheimer y la falta de concienciación social emergen como barreras significativas para un diagnóstico temprano. El 61% de los especialistas señala que los pacientes retrasan la búsqueda de ayuda debido al miedo y la desinformación. En España, el 44% de los casos de demencia leve y el 26,2% de deterioro cognitivo leve se atribuyen a la dificultad para distinguir entre el envejecimiento normal y los síntomas patológicos. Síntomas como la pérdida de memoria a corto plazo, problemas de concentración y dificultades para recordar palabras suelen ser detectados primero por familiares, pero la falta de acción inmediata agrava el problema.
Consecuencias del Infradiagnóstico: Impacto en Pacientes y Familias
El infradiagnóstico del Alzheimer tiene implicaciones profundas. Los pacientes que no tienen acceso a pruebas de biomarcadores del Alzheimer también pierden la oportunidad de acceder a tratamientos innovadores. Que podrían ralentizar la progresión de la enfermedad. Además de quedar excluidos de programas de apoyo y cuidados especializados. Jean George, directora ejecutiva de Alzheimer Europe, describe esta situación como un «panorama profundamente preocupante». La demora en el diagnóstico no solo afecta la salud del paciente, sino que también incrementa la carga emocional y económica para las familias, que enfrentan la enfermedad sin las herramientas necesarias para manejarla.
Soluciones Urgentes: Mejorar el Acceso y la Concienciación
Expertos como Lutz Frölich, catedrático de la Universidad de Heidelberg, enfatizan la necesidad de agilizar el diagnóstico y garantizar un acceso «oportuno y equitativo» a las pruebas de biomarcadores. Entre las medidas prioritarias se incluyen:
- Fortalecer el papel de Atención Primaria: Capacitar a los médicos de AP para identificar síntomas tempranos y realizar derivaciones ágiles.
- Invertir en infraestructura: Aumentar la disponibilidad de pruebas de biomarcadores en el sistema público de salud.
- Combate al estigma: Desarrollar campañas de concienciación para educar a la sociedad sobre los signos tempranos del Alzheimer.
- Formación especializada: Incrementar el número de neurólogos y equipos multidisciplinarios dedicados a las demencias.
Conclusión
Stéphane Epelbaum, vicepresidente de Asuntos Médicos Internacionales en Eli Lilly, destaca que las terapias emergentes contra el Alzheimer ofrecen nuevas esperanzas, pero su eficacia depende del acceso a pruebas de biomarcadores del Alzheimer para un diagnóstico temprano. La detección precoz mediante biomarcadores no solo permite intervenciones terapéuticas más efectivas, sino que también facilita la planificación de cuidados y el apoyo psicosocial. Avanzar hacia un modelo de atención proactivo, centrado en el paciente, es esencial para transformar el manejo de esta enfermedad y reducir su impacto creciente en nuestra sociedad.
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Referencia: Estudio Adelphi Real World Dementia, presentado en la Alzheimer Europe Conference 2025.







