Evaluación y Tratamiento de los Problemas de la Conducta en Mayores con Demencia
Los síntomas conductuales y psicológicos en pacientes con demencia son frecuentes y representan hasta el 50% de los ingresos en residencias geriátricas. Conductas como deambulación, gritos, agresividad o insomnio generan estrés en cuidadores y familiares. Estos cambios de conducta en mayores con demencia varían según el entorno y la tolerancia de quienes los atienden, lo que dificulta su manejo. Ya que es una de las causas más comunes por las que las familias necesitan encontrar residencias de mayores.
La demencia afecta la capacidad de inhibición, interpretación sensorial y memoria, generando conductas disruptivas. Factores como dolor, infecciones o cambios de ambiente pueden agravar los cambios de conducta de mayores con demencia. Por ello, es clave una evaluación integral para diferenciar entre causas médicas, psicológicas y ambientales antes de iniciar tratamientos farmacológicos o conductuales.
El tratamiento debe priorizar medidas no farmacológicas, como adaptar el entorno y ofrecer rutinas estructuradas. Los fármacos solo deben usarse en casos graves y bajo supervisión médica. Además, el apoyo a los cuidadores es esencial para prevenir el agotamiento y mejorar la calidad de vida del paciente.
Síntomas Conductuales y Psicológicos de la Demencia
Las conductas perturbadoras en la demencia incluyen agresividad física o verbal, deambulación, resistencia al cuidado y alteraciones del sueño. Estos síntomas surgen por daño cerebral que reduce la inhibición de impulsos y la capacidad de comunicación. Por ejemplo, un paciente puede gritar por dolor no expresado o deambular buscando seguridad.
El entorno influye en la tolerancia hacia estas conductas. Mientras que en casa ciertas acciones pueden manejarse, en instituciones suelen considerarse disruptivas. El síndrome vespertino es común, aunque no se sabe si se debe a fatiga del cuidador o cambios circadianos.
Problemas físicos como infecciones urinarias o estreñimiento pueden exacerbar los síntomas. La incapacidad para comunicar molestias lleva a conductas como agitación o llanto. Por ello, siempre debe descartarse una causa médica subyacente antes de atribuir los cambios a la demencia.
Tipos de Cambio de Conducta en Personas Mayores con Demencia
1. Conductas Físicas Agresivas
Estos cambios de conducta en mayores con demencia pueden representar un riesgo para la persona o quienes la rodean. Algunos ejemplos incluyen:
- Golpear, empujar o patear
- Morder, arañar o apretar a otras personas
- Arrojar o romper objetos
2. Conductas Físicas No Agresivas
Aunque no son violentas, pueden ser desafiantes para los cuidadores. Algunas manifestaciones son:
- Manipular objetos de manera inadecuada (esconderlos, tirarlos)
- Vestirse o desvestirse en momentos inapropiados
- Movimientos repetitivos (marchar, manerismos)
- Intentar irse o deambular sin motivo aparente
3. Conductas Verbales Agresivas
Expresiones que pueden alterar el ambiente y causar tensión:
- Gritos o explosiones de ira
- Insultos o lenguaje ofensivo
- Ruidos fuertes o inusuales
4. Conductas Verbales No Agresivas
Estas actitudes pueden ser agotadoras emocionalmente para el cuidador:
- Quejas constantes o llanto frecuente
- Demandar atención de manera excesiva
- Mostrar negatividad o descontento persistente
- Interrumpir conversaciones con comentarios fuera de lugar
Evaluación y Tratamiento de la Conducta en la Demencia
El Cohen-Mansfield Agitation Inventory es una herramienta útil para clasificar las conductas en cuatro categorías: físicamente agresivas (golpear, morder), no agresivas (desvestirse, esconder objetos), verbalmente agresivas (gritos, insultos) y no agresivas (quejas repetitivas). Esta clasificación permite un abordaje más preciso.
La evaluación de la conducta en mayores con demencia debe incluir historial médico, revisión de medicamentos y análisis de posibles factores ambientales estresantes. Un cambio abrupto en el comportamiento puede indicar delirium, una urgencia médica que requiere intervención inmediata. La observación sistemática ayuda a identificar patrones y desencadenantes.
Es fundamental adaptar el entorno a las necesidades del paciente. Señales visuales, horarios flexibles y espacios seguros reducen la ansiedad. En casos graves, el traslado a una institución especializada puede ser más efectivo que el uso de medicación.
1. Tratamiento No Farmacológico
Las intervenciones ambientales son la primera línea de tratamiento. Rutinas predecibles, actividad física y comunicación clara disminuyen la agitación. Técnicas como la musicoterapia o la estimulación cognitiva también han demostrado beneficios.
El apoyo a cuidadores es crucial. Capacitarlos en manejo de estrés y técnicas de comunicación reduce su carga emocional. Ya que es esencial para adatarse a la conducta de los mayores con demencia. Programas de respiro y grupos de apoyo ayudan a prevenir el agotamiento y la depresión, común en el 50% de los cuidadores familiares.
2. Tratamiento Farmacológico
Los inhibidores de la colinesterasa (donepezilo, rivastigmina) pueden mejorar síntomas conductuales leves. En casos graves, los antipsicóticos (risperidona, quetiapina) se usan con precaución, ya que aumentan el riesgo de eventos cerebrovasculares y efectos adversos en ancianos.
Los antidepresivos (ISRS) son útiles en pacientes con depresión asociada. Los sedantes solo deben emplearse de forma temporal por riesgo de caídas y deterioro cognitivo. La reevaluación periódica es esencial para ajustar dosis o suspender fármacos innecesarios.
CEAFA Aborda las Conductas Autolesivas en Demencia en su Próximo ‘Encuentro con Expertos’
La Confederación Española de Alzheimer y otras Demencias (CEAFA) organizará el próximo martes, 10 de junio de 2025, de 11:00 a 12:00 horas, un webinar titulado ‘Abordaje de las conductas autolesivas y el suicidio en el paciente con demencia’. Este evento virtual profundizará en cómo el deterioro cognitivo incrementa el riesgo de estas conductas, requiriendo estrategias especializadas para su prevención y manejo.
El encuentro, enmarcado en el ciclo «Encuentro con Expertos», contará con la participación del Dr. Manuel Sánchez Pérez, coordinador de la Unidad de Psiquiatría Geriátrica de la Fundación de Hospitales de Martorell y presidente de la Sociedad Española de Psicogeriatría (SEPG). Su ponencia abordará los factores de riesgo, señales de alerta y protocolos de actuación ante una conducta lesiva de mayores con demencia.
Esta iniciativa forma parte del Plan Operativo 2025 de CEAFA y del proyecto ‘Red de Agentes Activos en la Detección Precoz del Alzheimer’, cuyo objetivo es fomentar la sensibilización y educación sobre demencias. El webinar se transmitirá por Zoom y está dirigido a profesionales sanitarios, cuidadores y familiares.
A lo largo del año, CEAFA continuará organizando webinars temáticos con expertos en demencia, cubriendo aspectos clínicos, sociales y de cuidado. Estos espacios buscan mejorar la formación y el apoyo a quienes conviven con esta enfermedad, promoviendo una atención más humana y efectiva.
Conclusión
El manejo de la conducta en mayores con demencia requiere un enfoque multidisciplinario. Priorizar medidas ambientales y de apoyo al cuidador, junto con una evaluación médica exhaustiva, optimiza la calidad de vida del paciente y reduce la necesidad de fármacos. La investigación continua es clave para mejorar las estrategias de intervención.
