La Necesidad de Más Sanitarios en las Residencias de Mayores Es Acuciante
El envejecimiento poblacional representa uno de los mayores desafíos para los sistemas de salud y servicios sociales. Según proyecciones de la Organización Mundial de la Salud, para 2050 el número de personas mayores de 60 años se habrá duplicado a nivel mundial, alcanzando los 2.100 millones. Mientras que la población octogenaria se triplicará. Este escenario demográfico exige reformas profundas en la atención en las residencias de mayores. Especialmente en el ámbito residencial, donde urge dotar de más sanitarios en las residencias de mayores. Para garantizar una atención adecuada y de calidad.
¿Por qué se Necesitan más Sanitarios en las Residencias de Mayores?
El perfil actual de los residentes en centros geriátricos evidencia una complejidad asistencial creciente. Según el informe de la Fundación IDIS, el 67,7% de los residentes presenta alguna enfermedad diagnosticada, el 34% sufre patología neurológica y el 75,8% está polimedicado (consumiendo más de 7 fármacos simultáneamente). Estos datos reflejan una población vulnerable que requiere atención especializada constante. Como destacó Joan Barrubés de Antares Consulting, casi la mitad (45%) necesita oxigenoterapia, demostrando las altísimas necesidades de cuidado que presentan.
1. Impacto en la Reducción de Hospitalizaciones
Incluir a más sanitarios en las residencias de mayores podría reducir hasta un 30% las hospitalizaciones, un 11% las visitas a urgencias y un 20% la mortalidad. Estas cifras, extraídas del informe de la Fundación IDIS, subrayan la importancia estratégica de una atención sociosanitaria integrada. Como explicó Javier Martínez Peromingo, jefe de Geriatría de la Fundación Jiménez Díaz, muchos traslados hospitalarios no aportan valor añadido y generan estrés innecesario en los mayores, empeorando en ocasiones su condición inicial.
2. Calidad de Vida y Evitación de Estrés
La evitación de traslados hospitalarios innecesarios representa un factor crucial para la calidad de vida de las personas mayores. Silvia Lores, directora médica de Valdeluz Mayores, señaló desde su experiencia que para los residentes acudir al hospital supone un estrés significativo, y muchos regresan en peores condiciones. La disponibilidad de más sanitarios en las residencias de mayores permitiría realizar pruebas diagnósticas y tratamientos in situ, evitando desplazamientos traumáticos y mejorando la continuidad asistencial.
3. Necesidad de Estructuración Formal
La implementación de servicios sanitarios en residencias requiere una estructuración formal y planificada. Tener más sanitarios en las residencias de mayores no puede depender de la voluntad individual o de iniciativas aisladas. Es fundamental establecer protocolos claros, sistemas de coordinación con centros hospitalarios y programas de formación continuada para el personal. Esta organización formal garantizaría una atención segura, homogénea y de calidad en todos los centros residenciales, independientemente de su titularidad o ubicación geográfica.
4. Retos de Financiación y Modelo Actual
España presenta un modelo de financiación singular en el contexto europeo, donde la atención sanitaria en residencias no procede del presupuesto sanitario, sino de Servicios Sociales y las familias. Esta situación genera importantes desigualdades y limitaciones. Óscar Álvarez, director general de Atención al Mayor de Madrid, destacó la urgencia de aumentar la dotación financiera y fomentar la colaboración público-privada. Se necesitarán 100.000 camas adicionales en la próxima década, requiriendo una inversión de 15.000 millones de euros.
5. Desafíos en la Formación y Retención de Personal
La carencia de profesionales especializados representa otro desafío crítico. Como señaló Ignacio Vivas, vicepresidente de la Fundación IDIS, es crucial retener y formar personal cualificado. En cinco años, no solo faltarán plazas residenciales, sino también profesionales que puedan atenderlas. España cuenta actualmente con 13,6 plazas por cada 100 mayores de 80 años, por debajo de las 17 recomendadas por la OMS, y muy inferior a la media europea, lo que agrava la necesidad de acciones inmediatas.
6. Percepción Social y Necesidad de Visibilización
Según el estudio de Sigma Dos, los españoles valoran con 8,5 sobre 10 la contribución de los servicios sociosanitarios, pero solo el 47% los conoce de forma espontánea. Esta paradoja evidencia la necesidad de visibilizar y promocionar estos servicios. Marta Villanueva, directora general de la Fundación IDIS, destacó la importancia de un cambio cultural que reconozca el valor de la atención sociosanitaria integrada y la necesidad iminente de aumentar recursos e ingresos para este sector.
7. Tecnología e Innovación en los Cuidados
La implementación de tecnologías sanitarias en residencias requiere un impulso significativo. El 83,3% de la población desconoce las nuevas tecnologías disponibles para el cuidado de mayores. La digitalización y modernización de los centros permitiría mejorar la monitorización, el diagnóstico precoz y la atención personalizada. Como señaló Villanueva, se necesitan estrategias específicas para mejorar la cobertura tecnológica y garantizar que las residencias dispongan de equipamiento adecuado para atender las complejas necesidades de sus residentes.
Conclusión
Tener más sanitarios en las residencias de mayores trasciende lo asistencial para convertirse en un imperativo ético y social. Como concluyó Adolfo Fernández-Valmayor, secretario general de la Fundación IDIS, detrás de las cifras hay vidas humanas que merecen la mejor calidad de vida posible. La atención sociosanitaria integrada en residencias no es solo una necesidad práctica, sino una obligación moral con nuestras personas mayores, que deben recibir cuidados dignos, profesionales y compasivos en sus últimos años de vida.




